John 15:9-11

Jesús dijo a sus discípulos: “Como el Padre me ama, así también yo los amo a ustedes. Permanece en mi amor. Si guardas mis mandamientos, permanecerás en mi amor, así como yo he guardado los mandamientos de mi Padre y permanezco en su amor. Os he dicho esto para que mi gozo esté en vosotros y vuestro gozo sea completo”.

Oración de apertura: Jesús, mientras entro en oración y leo tus palabras, quiero agradecerte por el regalo de tu palabra. En las Escrituras, te encuentro y llego a conocer tu amor por mí. Hoy, me sorprende tu seguridad de que quieres que yo tenga tu alegría. Gracias por la esperanza que esto me inspira. Señor, creo en ti; espero en ti; te quiero. Profundiza mi fe, esperanza y amor para que pueda crecer en el gozo que prometes.

Encuentro con Cristo:

1. Permaneced en mi amor: Jesús acaba de decirnos que permanezcamos en él, y reiteró ese mensaje en el pasaje de hoy diciéndonos que permanezcamos en él. Nos dijo que permanece en el amor del Padre al guardar sus mandamientos y nos enseña que permanecemos en su amor al guardar sus mandamientos. Desafortunadamente, a menudo vemos los mandamientos de Cristo como cargas o restricciones a nuestra libertad. Jesús mismo prometió: “Llevad mi yugo sobre vosotros y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón; y hallaréis descanso para vosotros. Porque mi yugo es fácil y ligera mi carga” (Mateo 11:29-30). No sólo es fácil su yugo y ligera su carga; es a través de su yugo y carga que encontramos gozo.

2. Estabilidad Interior: Cuando confiamos en Jesús y permanecemos en su amor a través de la obediencia, nuestra vida desarrolla estabilidad interior. Somos “como una persona que construye una casa sobre roca sólida. Aunque la lluvia caiga a cántaros y las aguas crezcan y los vientos golpeen contra esa casa, no se derrumbará porque está construida sobre un lecho de roca”. Jesús contrastó esto con la “persona que edifica una casa sobre la arena. Cuando vengan las lluvias y las inundaciones, y los vientos golpeen contra aquella casa, se derrumbará con gran estruendo” (Mateo 7:24-27). Cuando nuestras vidas están edificadas sobre la roca sólida que es Cristo, encontramos verdadero gozo y paz.

3. Gozo completo: Jesús quiere que experimentemos su gozo y nos dice que este se encuentra viviendo en unión con él y guardando sus mandamientos. No encontramos la alegría verdadera y completa en la autodeterminación y la confianza en uno mismo, sino en el reconocimiento de nuestra dependencia de Dios como “fuente de sabiduría y libertad, de alegría y confianza” (CCC 301). Pero la alegría no sucede simplemente; se necesita trabajo La pereza espiritual puede robarnos el gozo. El Catecismo enseña que “la acedia o la pereza espiritual llega a rechazar la alegría que viene de Dios…” (CCC 2094). Para vivir en la alegría, podemos, “a través del esfuerzo humano”, adquirir las virtudes que “hacen posible la tranquilidad, el dominio de sí mismo y la alegría de llevar una vida moralmente buena” (CCC 1804), así como la superación de las cosas que conducen a la acedia. : “práctica ascética laxa, disminución de la vigilancia, despreocupación del corazón” (CCC 2733). ¿Cuán vigorosamente nos esforzamos por crecer en virtud?

Conversando con Cristo: Señor, a veces se me olvida que la verdadera alegría está en ti, no en las circunstancias. Olvido que eres la roca sobre la que se ha de edificar toda mi vida y donde encuentro la seguridad que me permite experimentar una alegría profunda. Señor, ayúdame a ser agradecido por todas las bendiciones de mi día y las pequeñas cosas que me dan la experiencia de la felicidad pero también ayúdame a desear la verdadera alegría que va más allá de las circunstancias. Mantenme enfocado en ti y seguro en ti. Fortalece mi confianza en ti, para que pase lo que pase, encuentre mi gozo al permanecer en ti y ser fiel a tus mandamientos.

Resolución: El Catecismo llama al domingo “el día de la alegría” (CCC 1193). Señor, hoy por tu gracia tomaré tiempo para planificar mi domingo para que sea una experiencia de alegría para mi familia y para mí.

Para mayor reflexión: Acedia: Beating Back the ”Noonday Devil” por Matthew Nelson en Word on Fire.